A través de Facebook se difundió recientemente el caso de un anciano de 89 años, quien no fue atendido a tiempo en un hospital de su pueblo Cabaiguán, por lo que el señor sufrió un infarto cerebral.
La noticia junto a dos fotos de la víctima, de antes y después de haber sufrido este incidente, fue compartido en el perfil de Ariel Fernández Díaz; sin embargo, quien redacta el texto dice llamarse Felicia Díaz Valdés, hija del anciano.
La víctima de esta historia es presentada como “Biruta”, y la propia hija narra cómo pasó de ser un hombre vital y sonriente a un “vegetal”.
“La que llaman doctora del puesto médico número 19 en las ambulancias… por inteligencia se negó a tomar la presión arterial, después de conocer por mí, su hija Felicia Díaz Valdés que mi padre se encontraba descompensado siendo un anciano de 89 años de edad con antecedentes de tres infartos cardiacos, diabetes mellitus, hipertensión y angina. Yusmary, estando en las puertas de mi casa se negó a tomar dicha presión, alegando que no podía porque se encontraba haciendo un censo de vacunación”, explica Felicia cómo la doctora se negó desde el principio a asistir a su padre.
En el mismo texto alega que esta doctora le dijo que pasaría al siguiente día para chequear a su padre, sin embargo tampoco fue: “Durante la noche lo volví a llevar al hospital nuevamente con presión alta; los médicos me sugieren que debía llevar un seguimiento del médico de la familia, desconociendo que en mi puesto médico había una veterinaria y no un médico de familia, que al otro día después de prometer que iría por la mañana pasó por mi casa a la ponchera de la esquina, sin mirar que allí había un viejo en un portal esperando por su atención”.
Cuenta esta hija que pasó lo peor y su padre no aguantó más la tensión alta, sufriendo un infarto cerebral que lo dejó postrado como vegetal, perdiendo la movilidad y el habla.
Sobre lo sucedido con la doctora que le falló a su padre, Felicia señaló: “Pregunto: ¿Es esta la potencia médica por la que aplaudimos tantas noches? Después de alegar mi caso con Jorge el Subdirector de Salud Pública, quién me envió con Susel la directora del PPU, recibo como respuesta que se había comprobado por parte de Maritza, la de atención a la población en el PPU, que se le había puesto una sanción de un descuento de salario por 2 meses y una amonestación frente a la dirección. Esta sanción convalidará la situación de mi padre y de todos sus familiares; en ver un hombre convertido en un vegetal mientras veterinarias como Yumariys continúan en el mismo puesto médico número 19, al que pertenecemos toda la familia y también Biruta”.
Y para terminar su post en esta red social, Felicia hace una petición a los lectores dejando claro que ella no se rendirá en buscar justicia para su padre: “Quiero que por favor compartan esto, mientras yo sigo luchando a niveles superior en la provincia y si es preciso con el Ministro de Salud”.
Este señor conocido en cabaiguan por muchas personas como biruta lo muestro antes del 24 de mayo y después de ese mismo…
Posted by Ariel Fernandez Diaz on Monday, June 14, 2021
Al respecto, varias personas dejaron sus comentarios ante tan lamentable situación: “Si no tiene vocación para la medicina que no la ejerza”… “Recoge firmas por internet que la metan presa”… “Lo que tienen que hacer como mínimo es quitarle el título de doctora”… “Qué falta de respeto, no dejes eso de la mano, ella no merece estar en ese puesto, se ha perdido la vergüenza ya quieren cobrar sin tener que trabajar ahora ya él no tiene remedio y ella sigue ahí, que injusticia no hay principios ni valores todos nos engañan”… “Si la doctora hubiera hablado públicamente de la situación del sistema de salud en Cuba le hubieran quitado el título, pero esto nada más le duele a su familia; que impotencia por Dios, descuento y sigue matando a personas, ni para veterinaria sirve”.