Decenas de personas llegaron al Publix de Palm Beach donde el pasado jueves fallecieron una abuela y su nieto de un año, tras recibir impactos de bala por un hombre, que los atacó sin razón aparente.
Cientos de flores y peluches fueron colocados en el lugar del incidente por parte de familiares e incluso desconocidos que desearon rendir un homenaje a estas dos víctimas. Los visitantes se veían elevando oraciones al cielo, y otros bastante afectados por lo sucedido.
“Una persona enferma, de verdad tenía que ser una persona enferma porque nadie tiene corazón para acabar con un ser que no tiene culpa de la maldad que hay en este mundo ahora”, dijeron alarmados algunos de los presentes.
Como se recordará, el pasado jueves un hombre llegó al referido establecimiento y sin mediar palabras sacó un arma y disparó en primera instancia al niño, para luego empezar a forcejear con la abuela de 69 años, quien también fue baleado.
Según los investigadores, el tiempo de forcejeo entre la valiente abuela y el agresor que posteriormente se quitó la vida, sirvió para que muchas personas presentes en el local, salvaran sus vidas y salieran antes que el hombre les disparara a ellos también.
Entre tanto, la policía informó que el agresor respondía al nombre de Timothy Wall, de 55 años, quien al parecer, residía cerca del Publix.
Las investigaciones han comenzado a arrojar resultados: “Este hombre estaba poniendo en su Facebook que quería matar personas y niños, y vienes aquí con tus hijos. Te quedas pensando. Estaba él aquí cuando yo compraba, pude haber sido yo con mi bebé en brazos, podía haber sido yo quien él estaba persiguiendo… Es impactante, y saber que teníamos a alguien en el vecindario que estaba básicamente persiguiendo personas para matar en el supermercado donde compro con mi hijo, es duro, es duro”, expresan vecinos de la zona.
Al respecto, el alguacil del Condado Palm Beach, Ric Bradshaw, se notó visiblemente molesto por el trágico incidente, asegurando que: “Hubo oportunidad de detener esto. ¿Saben por qué? La razón es que él está en Facebook, y él ha dicho: quiero matar gente y niños. Tiene amigos, obviamente lo vieron, su ex mujer dijo que él estaba actuando raro, que creía que estaba siendo seguido, estaba paranoico. ¿Ustedes creen que una sola persona nos llamó para informarnos? No”.
Del asesino solo se sabe que desde hacía unos meses estaba enfrentando una dura situación económica con la que ni siquiera podía mantenerse en un mes.
A pesar que el lugar de los acontecimientos permaneció acordonado desde el jueves, este sábado reabrió sus puertas entre sentimientos de zozobra y angustia ante la inseguridad reinante últimamente en cualquier zona de Miami-Dade.