La madre cubana María García, radicada en Estados Unidos y paciente de cáncer, pide la liberación de su hijo Carlos Trueba García, quien se encuentra detenido en el Broward Transitional Center de Pompano Beach, Florida, y podría ser deportado a Cuba.
En entrevista ofrecida en su domicilio al periodista Javier Díaz, del canal Univision, la madre señaló que su hijo es su único sustento y ofreció detalles de su detención: “Yo lo vi cuando lo estaban entrando por la puerta de cristal, pero yo no me puedo apurar porque yo ando en el walk”.
Su hijo fue conduciendo y ella le acompañó, pero después de ver que lo detuvieron, ella no podía conducir sola de regreso a casa debido a su enfermedad.
María cuenta que le suplicó a uno de los funcionarios del centro de detención que ella no podía valerse por sí sola: “Le expliqué que yo estaba muy mal, las quimioterapias son fuertísimas y uno no las soporta a veces, y entonces me dijo ‘ah bueno señora, mire a ver lo que usted va a hacer, llame a un familiar o a un amigo porque si usted se queda ahí le remolcamos el carro’”.
Con relación a la situación que afronta su hijo, aseguró: “Me siento muy mal, porque él es el sostén de esta casa. Yo desde el 2020, cuando comenzó la pandemia, empecé a enfermarme y no pude trabajar más”.
Tras regresar de su trabajo, Carlos la ayudaba a bañarse: “Ya yo no puedo inclinarme ni agacharme, porque me caigo. Los temblores me dan desequilibrio. Él es el único sostén que yo tengo, él es quien me llevaba a las terapias y me traía. Él salía, trabajaba, venía y así. Él pinta casas, chapea, lo que consiga por ahí, va y lo hace, le pagan y viene y trae el dinero”.
Una madre con cáncer de uno de los detenidos por ICE en Miami dice que su hijo es su único sustento. Esta sábado han convocado una protesta a las afueras del restaurante Versailles para seguir exigiendo la liberación de quienes están defendido para ser deportados a Cuba!
Posted by Javier Díaz on Saturday, October 22, 2022
Luego de su entrada al país, Trueba García permaneció durante 18 meses detenido en Arizona. No le fue aprobado su asilo político, pero lo dejaron en libertad con una orden de deportación, y tres años después es detenido nuevamente.
María señala que todo sucedió debido a un supuesto error: “El jefe de esa prisión habló con ellos y les dijo que ellos habían cometido un error, que habían metido mal el dedo, que le dieran dos o tres días, que ellos iban a arreglar ese problema”.