Los familiares del reguetonero cubano Daniel Muñoz, más conocido como El Dany, han querido rendirle homenaje cuando se cumple un mes de su fallecimiento.
En las últimas horas apareció en la cuenta de Instagram de Daniela, la hija del reguetonero cubano visitando uno de los murales que pintaron en La Habana para mantener vivo el legado del popular artista.
Se trata de una imagen muy emotiva, pues parece como El Dany estuviera en el cielo y desde allá arriba estuviera mirando a su pequeña Daniela, una de las personas más importantes y especiales de su vida.
Pero este no fue el único homenaje que Daniela y su madre Iraisel le rindieron al reguetonero, pues ambas acudieron a la esquina donde El Dany jugaba baloncesto junto a sus amigos del barrio y colocaron flores en el pequeño santuario que crearon en esa zona.
Iraisel, también utilizó las redes sociales para dedicarle un emotivo y conmovedor mensaje y aseguró que va a continuar amando al artista.
A continuación, reproducimos íntegramente las palabras de Iraisel a El Dany:
Amor mío, ya se cumple 1 mes de tu regreso a casa con Dios (y la verdad no sé qué decir), pero como tú mismo escribiste antes de partir: dejar algo guardado significaba que siempre estarías, aun cuando te marchases porque en un punto como tú bien lo dijiste todos nos volveremos a reencontrar y caminaremos por un mismo sendero.
Sí, tenías razón, yo tengo lo que dejaste guardado, nuestra hija y sé que a través de ella y de tu música (podré seguir sin ti a mi lado) y vivirás para siempre entre nosotros y en nuestros corazones. El amor que siento hacia ti sobrepasa todo entendimiento y hasta la muerte en sí misma, tu partida me enseñó que cuando se ama, se ama para siempre.
La vida a veces suele tener caminos misteriosos, pero por mi parte yo te extraño y extrañaré el resto de mi vida. Quizás tus alas estaban listas para volar, pero mi corazón nunca estuvo listo para verte partir y aunque sé que tu cuerpo descansa, tú seguirás con nosotras.
Tú fuiste mi roca, mi vida, mi esposo, mi mejor amigo, mi compañero de batallas, un alma noble, pero sobre todo fuiste el mejor padre del mundo. Vuela alto mi vida e ilumínanos con tu sonrisa desde el cielo. Envíanos mucho amor porque solo desde el amor sacaré las fuerzas para seguir sin ti. Vuela alto mi vida, algún día caminaremos ese sendero juntos hasta la eternidad, por ahora solo desear que mis besos vuelen hacia el cielo para ti. Te amaré siempre.