El cubano Joaquín Ciria de 61 años de edad, fue liberado el pasado miércoles 20 de abril en San Francisco, tras pasar 32 años de injusta encarcelación por un crimen que no cometió.
Medios locales apuntan que Ciria fue declarado culpable del asesinato de su amigo Félix Bastarrica con un arma de fuego en el año 1990 en San Francisco, California, y fue encarcelado con 29 años de edad, cuando acababa de convertirse en padre de un niño que apenas tenía seis semanas de nacido.
A su salida de la oficina del alguacil de San Francisco, declaró a la prensa y a las amistades que esperaban ansiosas su libertad: “Es una alegría tremenda, es una alegría incalculable, de saber que por fin estoy libre. Me gustaría sentarme solo con mi hijo a hablar con él, llorar con él si tengo que llorar, y explicarle que ya todo pasó”.
Ciria, inmigrante cubano radicado en San Francisco en la década de los años 90, aseguró qué fue lo más difícil: “Lo más duro para mí fue primeramente estar privado de libertad cuando sabes que no te lo mereces, no estar con tu familia. El hecho de que mi madre se me muriera en Cuba sin haber tenido la oportunidad de que ella supiera que su hijo está libre”.
La organización Proyecto Inocencia del Norte de California, ayudó a la liberación del isleño. En tal sentido, Lanna Sánchez, vocera de dicha organización, declaró: “Hemos ayudado a Joaquín por 3 años. Pero durante todos los 32 años Joaquín ha trabajado su caso por su propia persona”.
Su hijo Pedro Ciria, afirmó: “No hay nada en el mundo que pueda reparar todo ese tiempo perdido, pero hay que empezar”.
Joaquín Ciria pasó 32 tras las rejas por un crimen que no cometió. Momentos tras salir de prisión habló con la Edición Nocturna sobre cómo se siente la libertad @uninoticias 24/7 por @vix
Posted by Elian Zidan on Wednesday, April 20, 2022
Por su parte, la esposa de Ciria, Yojana Paiz expresó: “Es como volver a nacer, volver a empezar una relación con él, volver a conocerlo, volver a tener tantos sueños que él tenía en aquel entonces”.
Su primo Raimundo Alfonso, indicó: “Yo recuerdo que él me llamó a mí por teléfono y me dijo ‘Me están acusando de algo que yo no hice’, y por la manera de él hablar conmigo y en el tono de su voz, yo supe desde un principio que él era inocente”.
La Fiscalía de San Francisco reconoció que hubo fallos en el caso de Ciria y aseguró que buscará la justicia para que inocentes como Ciria no sean encarcelados injustamente.
El canal Univision abordó las inconsistencias en el juicio de Ciria, donde a pesar de no haber evidencias físicas que lo vincularan con el tiroteo, los inspectores de la policía de San Francisco se enfrascaron en comprobar que el cubano era el pistolero, tomando como referencia rumores callejeros y el testimonio de George Varela, quien lo acusó de haber manejado el vehículo en el que huyeron del lugar.
Dicho testimonio de Varela, fue el punto clave para que Ciria pasara 32 años de su vida tras las rejas. Varela tenía en aquel momento 18 años de edad y recibió la presión de la policía y testificó en contra del cubano a cambio de inmunidad total.
Entretanto, el Proyecto Inocencia del Norte de California, asegura que su próximo paso será lograr que Ciria se le declare inocente para que tenga derecho a reclamar una compensación económica por 140 dólares diarios por cada día en prisión, por lo cual podría llegar a recibir aproximadamente 1.6 millones de dólares.
“Eso ya sería decisión de él, porque sea lo que sea, que le recompensen o no, no va a cambiar los años que vivimos con él adentro y nosotros acá afuera. No va a recompensar nada monetario todo lo perdido, especialmente mi hijo que no tiene ningún recuerdo de su padre aquí afuera”, añadió Yojana Paiz, esposa de Joaquín.