¿Te pasa que cuando viajas a algún país latinoamericano, escuchas palabras que crees no saber su significado y solo se trata de un objeto que conoces pero emplean un nombre distinto al que utilizas?. Conozcamos algunas de estas palabras latinas:
Una de las palabras más usadas en Latinoamérica es “autobus”, pero se diferencian de acuerdo al territorio. En Argentina se le conoce como colectivo; Micro o liebre en Chile; camión en México; y buseta y carrito en Venezuela.
Al maíz se le dice en México “elote”; en Venezuela “jojoto”; en Ecuador “choclo”; en Colombia “mazorca”.
En cuanto a las pinzas de tender ropa, en Bolivia se le conocen como “agarrador”; “gancho” en El Salvador; “pinches” en Puerto Rico, “palito de ropa” en República Dominicana, “perro y perrito de ropa” en Chile.
La forma de atender una llamada telefónica tampoco es similar de una país a otro. Por ejemplo: en México se dice “¿Bueno?”, en Venezuela “¿Aló?”, en Argentina “¿Hola?”.
Las personas que presumen su dinero son llamadas en Ecuador “aniñados”; en Venezuela “sifrinos”, en México “fresas” y en Chile “cuico”.
Comprar zapatos deportivos es otra odisea, porque en Uruguay le llaman “championes”; en Venezuela “gomas”; en Puerto rico “tacos”; en Colombia “zapatillas”.
Entre tanto, al utensilio que sirve para unir fuertemente los papeles, se le llama “grapadora” en Puerto Rico; en Paraguay “presilladora”; “engrapadora” en Uruguay y en Chile “corchetes”.
Las palomitas de maíz son amadas en todas partes. En Argentina se le conoce como “pochoclo”; en Ecuador “canguil”; en Chile “cabritas”; en Venezuela “cotufas”; en Cuba “rositas de maíz”; en Colombia “crispeta”.
Indudablemente, América Latina está repleta de palabras que sirven para describir conceptos comunes de la región, pero bajo la autoctonía de cada país.